Palabras

Palabras

Quería decirle tantas cosas, pero mi corazón no me lo permitía, latía tan rápido… Ella estaba ahí sentada escuchando todo lo que yo le decía pero su mirada ya no era la misma, cambio, ansiedad bajo su máscara… Era lo que ella siempre había deseado escuchar, y era lo que yo siempre había querido callar, era el final de lo que nunca comenzó, de lo que nunca permitió… Creía que habría tanta tristeza en mi corazón que me destrozaría lentamente, pero no fue así… Había tristeza eso era seguro, pero la tranquilidad era mayor. Temía que te arrepintieras, quería que lo hicieras… Mi corazón lo anhelaba, pero sabía que nunca sucedería lo que yo deseaba. La verdad es que yo sabía que nunca sucedería pero no quería aceptarlo, sabía que ella nunca lo permitiría... También sabía que llegaría el día en que de mi lo escucharía, y no solamente de ella. Ella seguía sentada frente a mí sin decir nada, a la espera de lo que de mi saliera en instantes, callada en su mirar, quizá deseaba alejarse y no escucharlo, quizá ella sabía lo que yo le quería decir, pero esperaba quede mi boca saliera... Sin palabras me quedé... mi mirada ansiosa estaba. El silencio era su mirada. Terminar y nunca olvidar, pero tampoco recordar.

Clariconfusión

Nota curiosa: Las fotos las tomé yo...

Clariconfusión

Este es otro de esos días en que la clariconfusión se infiltra y llega a mi mente... He de suponer que no estás entendiendo nada, bueno en ese caso explicaré...

Comencé a dar vueltas y vueltas en la silla, al principio por que estaba esperando que me respondieran un mail, pero luego iba cada vez más rápido tanto que al hacer la cabeza hacia atrás sentía que iba a caer, más rápido, y ahora no podía estirar las piernas de la velocidad, si alguna vez lo intentas asegurate de no haber comido antes... No quería parar, sentía que pronto me iba a absorber la mancha gigante de colores indefinidos y combinados que era mi cuarto, cerré mis ojos y perdí la noción de dónde me encontraba y lo mejor fue que no quería recordar dónde estaba...

Las ideas parecían fluir a la misma velocidad, pero tan rápido venían a mi se escapaban como si se diluyeran en mi habitación que ahora parecía una gran masa líquida de colores mezclados rodeándome... El no poder retenerlas me frustraba y sabía que si me detenia no se escaparían, pero simplemente no quería parar, sentía que podía huír de la realidad así... (pensamiento bastante irónico y absurdo). Parecía que la silla llevaba una velocidad constante y nunca se detendría.

Comencé a marearme tanto que sentía mi estómago haciendo lo imposible por no salirse... Quería ir más rápido pero ya no lograba más velocidad, un cambio quería un cambio, me detuve y me puse de pie, ojalá no hubiera hecho esto... mi cabeza parecía estallar y las imágenes seguían girando, sentí que no encontraba el equilibrio y pronto mis piernas flaquearon y caí al suelo... No recuerdo nada más, hasta que volví a despertar, seguía en el suelo.

Logré levantarme y llegar hasta mi cama, me acosté y cerré los ojos, me sentía débil, cansada y mareada... Dormí unas horas, o eso me pareció a mí... No supe cómo sucedió, pero en mi cabeza pululaban millones de preguntas, unas con respuestas y otras que sólo me hacían dudar, la imagen de una foto contigo me hizo dudar aún más...

¿Dudar? no quiero hacerlo, hace pocos minutos no lo estaba... maldita silla... tú fuiste la culpable o quizá fui yo... no quiero saber quién fue, sólo sé que quiero que ésta nube que no me permite ver con claridad se esfume...